Detén el tiempo que vivamos más y más profundo
detén el tiempo que seamos libres
que no nos aten demasiadas cadenas
y que nos de tiempo a ser felices.
Detén el tiempo que podamos saborear cada sorbo de la vida
que logremos exprimir cada segundo
que se paren las agujas, el tiempo...
y todos disfrutemos nuestro momento.
Detén el tiempo que valoremos lo realmente importante
que no digamos aquello que realmente no sentimos
y podamos olvidar los enfados
que el tiempo sea presente y no pasado.
Detenedlo que amemos libremente
y elijamos a los amigos del alma
que tengamos muchos seres queridos
que nos quieran y nos den mimos
que nos enseñen el verdadero camino
que nos ayuden a levantarnos después de caernos
y se sientan orgullosos de lo que seamos
Detén el tiempo que despertemos bailando
que el destino no nos haga sufrir o llorar
que ganemos sonrisas y perdamos lágrimas
que decidamos el fin del viaje y no la meta
que luchemos siempre por algo con razón y corazón
que conservemos siempre lo que con cariño, esfuerzo y dedicación conquistamos
y que seamos siempre fuertes, optimistas y estemos preparados...
¡Detenlo porque a la velocidad que pasa el tiempo
no podremos vivir ni tanto ni tan intenso!